El Internet de las Cosas: Pagos NFC

Los nuevos avances tecnológicos están llegando a lugares insospechados en este siglo XXI. El término ‘Internet de las Cosas’ está abriendo las puertas a que nuestros dispositivos de uso cotidiano adquieran otras funciones que dejen de lado las más tradicionales. Dicho término ha evolucionado con el paso de los años y en la actualidad los electrométricos (por ejemplo: un frigorífico) están tomando un nuevo rumbo y un mercado en donde poder explotar, el del eCommerce.

Este fenómeno del ‘Internet de las Cosas’, dentro del comercio electrónico, aporta numerosos beneficios tanto a los usuarios como a las empresas. Uno de ellos, es la comodidad de los pagos gracias a la tecnología NFC. La tecnología NFC es lo que conocemos como comunicación de corta distancia. Esto permite que dos dispositivos próximos físicamente compartan pequeñas porciones de información. 

En relación a los usuarios, este sistema permite una mayor seguridad en los pagos, por ejemplo, a través de los dispositivos móviles. Es su piedra angular. Se utiliza un método de encriptado que cualquier intento de hackearla o interceptarla resulta muy difícil. Esto mismo garantiza una mayor rapidez, comodidad y un mayor ahorro de tiempo. Sin duda, un aspecto que interesa mucho al usuario a la hora de realizar una compra en cualquier sitio. Por otro lado, las empresas también tienen ventajas con este método de pago. Pueden simplificar operaciones, acelerar procesos y obtener más información a partir de datos conectando los dispositivos para transformar el negocio. 

En esta línea, Redsys, dentro del entorno de la propia empresa, ha implantado mPos: una aplicación creada para que los comercios, de una forma muy sencilla, puedan realizar cobros a través de un dispositivo móvil, solo con la ayuda de un PinPad. Por ello, el comercio accede con un usuario y contraseña facilitado por la entidad, vincula el PinPad y ya está listo para recibir pagos.

También, mPOS permite, además de realizar cobros con tarjeta EMV o banda, dar de alta los productos asociados al comercio, simplificando los pedidos y las ventas.

En líneas generales, el ‘Internet de las Cosas’ ofrece un gran abanico de ventajas experimentadas que favorecen tanto al consumidor como a los comercios.