El pago contactless: sencillo, rápido y cada vez más común.
El avance de la tecnología y la expansión imparable de la red de redes han favorecido la creación de métodos de pago cada vez más cómodos. Las compras por internet han hecho imprescindible (y a la vez posible) un enorme aumento de la seguridad en los pagos con tarjeta. Y esto último ha terminado por vencer las reticencias tradicionales de la gran mayoría de los usuarios. Uno de los últimos pasos ha sido la llegada del pago contactless, en el que ya basta tan solo con acercar la tarjeta al terminal. El pago, por tanto, se oficializa en tan solo unos segundos. Y no solo eso, ya que en los últimos tiempos ni siquiera es necesario introducir el PIN o clave de seguridad en la mayoría de las compras. Ello ha hecho que algunas personas terminen por olvidar su clave. Y que, en ocasiones, se vean en la coyuntura de no poder pagar cuando se le solicita.
¿Cuándo se solicita el PIN o clave de seguridad a la hora de realizar un pago contactless?
Por prevención de robo o extravío de la tarjeta, las entidades financieras han marcado algunos limites de transacciones o importes,en los que el usuario tendrá que utilizar el PIN, los casos en que el comprador deberá introducir el PIN para formalizar la compra en un comercio. Son los siguientes:
- Sobrepasar la cantidad mínima de 150 euros en compras desde la última vez que la clave de seguridad fue introducida. Cada vez que se sume nuevamente esa cantidad, se solicitará teclear la clave, por mucho que los pagos hayan sido pequeños.
- Sumar al menos cinco pagos sin introducir dicha clave de seguridad.
- Realizar una compra superior a los 50 euros. Siempre que el desembolso exceda esa cantidad, habrá que introducir la clave.
Conviene aclarar que, para pagos tradicionales (introduciendo la tarjeta en el terminal o datáfono) siempre habrá que introducir la clave de seguridad independientemente del importe, y como puede observar en este artículo, sus transacciones contactless son completamente seguras.
