¿Estás seguro de que tu tarjeta de crédito está protegida? La mayoría de los españoles poseen al menos una tarjeta de débito o crédito, lo que significa que estas pueden terminar en manos de ciberdelincuentes sin que sus titulares se den cuenta. En 2020, se reportaron 257,907 fraudes bancarios y otros delitos informáticos en España, según el Observatorio Español de Delitos Informáticos.
Aunque no podemos renunciar a las tarjetas, sí podemos dificultar la tarea de los ciberdelincuentes tomando medidas para personalizar la seguridad de nuestras tarjetas. Aquí te explicamos cómo hacerlo.
Modificar las características de seguridad de tu tarjeta es fácil. Solo debes ingresar en la aplicación o sitio web de tu banco, identificarte y acceder a la sección de tarjetas para modificar las características de seguridad. En esta sección, puedes adaptar los límites a tus necesidades y activar o desactivar las funcionalidades de la tarjeta.
Además, puedes tomar otras medidas para mejorar la seguridad de tus tarjetas, como escoger un código PIN con un nivel alto de seguridad, apagar tus tarjetas mientras no las uses, limitar la cantidad de dinero que puedes gastar al día en comercios o bloquear los pagos contactless para que siempre te pidan el código PIN.
Algunas de las medidas de seguridad que puedes configurar en tus tarjetas incluyen:
Modificar el código PIN de tu tarjeta: elige una clave complicada, con un nivel alto de seguridad. Evita secuencias sencillas (1234), números repetidos (1111) y fechas (tu cumpleaños, por ejemplo).
Activar las notificaciones: asegúrate de tener activado el servicio de alertas (SMS, e-mails o notificaciones push) y configúralo para recibir un aviso cada vez que se use tu tarjeta para pagar una compra o para sacar dinero.
Encender y apagar temporalmente las tarjetas: puedes aplicar un bloqueo temporal a tus tarjetas cuando no las uses y volverlas a encender cuando necesites hacer una compra o sacar dinero.
Editar los límites en compras y reintegros: algunas tarjetas te permiten fijar límites diarios o por operación, lo que puede ayudar a controlar tus gastos y reducir el riesgo de fraudes.
Configurar la seguridad de tus tarjetas es una medida importante para proteger tu dinero y reducir el riesgo de fraudes y otros delitos informáticos. Aprovecha todas las herramientas que los bancos ponen a tu disposición y toma medidas adicionales para personalizar la seguridad de tus tarjetas. No te arriesgues a perder todo tu dinero en un fraude: asegúrate de que tus tarjetas estén protegidas.
